Un cuento de rutina

UN CUENTO DE RUTINA...
Escrito por NINOSKA VILLALOBOS
 


Siempre la misma rutina , estoy cansada de trabajar y ver todos los días las mismas personas en mi camino, pasar horas trabajando. Llego a casa y mi marido siempre del mismo modo, con la misma actitud, la misma comida para la cena. Entro al baño y en seguida, él comienza a reclamar.

Quiero descansar y ver mi novela, pero mis hijos no me dejan, porque quieren jugar conmigo y conversar, no entienden que estoy cansada. Mis padres también me irritan algunas veces. Y entre el trabajo, marido, hijos, padres y el cuidado de la casa, ellos me vuelven loca.

¡Quiero paz! La única cosa buena es dormir. Al cerrar mis ojos siento un gran alivio, me olvido de todo y de todos. Al dormir...........

_" Hola, te vine a ayudar "

_ ¿Quién eres? Cómo entraste?

_ Soy un Siervo de Dios . Él dice que escuchó tus quejas y que tienes la razón .

_ Eso no es posible, si eso es así, entonces yo estoy.........

_ "Correcto, lo estás. Ya no te preocupará más, el ver siempre las mismas personas, ni aguantar a tu marido con sus reclamos y su actitud, ni tus hijos que te irritan, ni tendrás que escuchar los consejos de tus padres y no tendrás más una casa que cuidar".

_ Pero...¿Qué pasará con todos? ¿Con mi trabajo? ¿Mi casa?.

_No te preocupes, en tu trabajo ya contrataron a otra persona en tu lugar y ella, ciertamente, está muy feliz porque estaba sin trabajo.

_ ¿ Y mi marido, mis hijos? .

_" A tu marido se le dio una buena mujer que lo quiere bien. Lo respeta y lo admira por sus cualidades. Acepta sus virtudes y sus defectos y todos sus reclamos. Además de eso, ella se preocupa por tus hijos, como si fuesen de ella. De verdad, tiene una devoción muy grande ya que es estéril. Por más cansada que llega del trabajo, dedica tiempo para jugar con ellos y para hacer feliz a su marido. Todos están muy felices".

_¡ Pero, yo no quiero eso

_" Lo siento mucho.... la decisión ya fue tomada ".

_Pero, eso significa que jamás volveré a besar el rostro de mis hijos, ni decirle "yo te amo" a mi marido y mostrarles cuan importantes son en mi vida. Ni darles un abrazo a mis padres.

_ ¡No, no quiero morir.... quiero vivir!!!! Envejecer junto a mi marido, hacer ese viaje que hace mucho lo planeamos, vestirme con aquella ropa que me compró y que tanto le gusta, llevar a mis hijos al paseo que siempre les prometí. No quiero morir todavía.....no por favor Dios , no...

_ "Pero, era lo que tu querías, descansar. Ahora, ya tienes tu descanso eterno, duerme para siempre".

_ ¡No, no, no... no quiero, por favor Dios!

_ ¿ Qué pasó amor ? ¿ Tuviste una pesadilla ? Dice mi marido al despertarme con paciencia y muy cariñosamente.

_ Si, una pesadilla horribl.......Paré la frase a la mitad, miré su rostro, su semblante preocupado conmigo, ahí junto a mí y entonces, sonriendo le dije: No mi amor, no tuve una pesadilla, tuve un encuentro con Dios, que nos ama y que acaba de darme una nueva oportunidad.

Si por alguna casualidad, te viste reflejada en este relato, es que DIOS TE HA DADO TAMBIÉN A TI, OTRA OPORTUNIDAD. NO LA DESAPROVECHES.


ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO...SALUDOS